lunes, 30 de septiembre de 2013

Playlist 42: El que apaga la luz en otoño

El otoño es la estación que más música ha sugerido. Por eso en esta lista de canciones otoñales, y algunas también crepusculares, hay un poco de todo: Jazz, mucho jazz, y también pop y rock. Aunque el mes se nos va, no podía faltar la Canción de septiembre de Kurt Weill. El otoño es época de ardores revolucionarios -Llegará octubre-, igual que los apaga con decepción -My October Symphony-. He recogido referencias a la atmósfera y sus fenómenos -la niebla en A Foggy Day, hojas secas y presagio del frío con California Dreamin'- y por supuesto la  lluvia, de forma frívola y festiva en It's Raining Men, o como metáfora de la guerra y la amenaza atómica en Dylan. Que ustedes lo disfruten y no se olviden del paraguas.

1. Lou Reed - September Song
2. Frank Sinatra - Come Rain or Come Shine
3. Chet Baker & Bill Evans - `tis Autumn
4. The Kinks - Autumn Almanac
5. Beny Moré - Parece que va a Llover
6. El Pecho de Andy - Llegará Octubre
7. Pet Shop Boys - My October Symphony
8. The Beatles - Rain
9. Brook Benton - Rainy Night in Georgia
10. Billie Holiday - A Foggy Day
11. The Mamas and the Papas - California Dreamin'
12. The Weather Girls - It's Raining Men
13. Neil Young - Raining in my Heart
14. Kiko Veneno - Estaba Lloviendo
15. Bob Dylan - A Hard Rain's A-Gonna Fall



viernes, 27 de septiembre de 2013

Andrés de Vandelvira, Renacimiento entre olivos

Interior de la Catedral de la Asunción de Jaén
El reportaje lo realizó y lo emitió en forma de miniserie Canal Sur en 2010 y volvió a emitirlo esta semana a altas horas de la noche. Créanme que merece la pena verlo en HD (Alta definición). Se trata de un espléndido documental dedicado a la vida, la obra y el legado del arquitecto de la Catedral de Jaén y tal vez el más inspirado de los constructores del Renacimiento español, Andrés de Vandelvira (AlcarazAlbacete1509 - Jaén1575). La sala capitular y la sacristía de la seo de la Asunción son la obra cumbre del artista, que nos dejó la mayor parte de su obra esparcida por la actual provincia de Jaén con sus construcciones en la Plaza Vázquez de Mella de Úbeda y en Alcalá la Real como grandes hitos, aunque su legado puede rastrearse en ciudades como Málaga, Sevilla y Cádiz.


La Catedral de Jaén de noche
Vandelvira fue uno de esos andaluces -de adopción en su caso- claros que enaltecía Antonio Machado en referencia a García Lorca. Aunque practicamente no salió de su estrecho marco geográfico, fue instruido por su padre sobre los hallazgos de sus colegas contemporáneos de Italia. Algunos de sus trabajos como la propia Catedral de Jaén evoca modelos florentinos del Quatrocento italianoSin embargo también fue autodidacta: Fue el inventor de la bóveda vaída y de otras ingeniosas soluciones constructivas.


Capilla del Salvador del Mundo, en Úbeda
Entre sus obras más notables está la Capilla del Salvador del Mundo, realizada en Úbeda sobre un proyecto inicial de Diego de Siloé -el autor de la Catedral de Granada-, por encargo de Francisco de los Cobos, protector y mecenas tanto de Andrés como de su padre. Jódar, Hornos, La Guardia..., el documental nos va guiando por el mapa de los lugares donde Vandelvira dejó su impronta, es decir el triunfo de un clasicismo retornado, la piedra y las manos de los hombres al servicio de la luz, la claridad de las formas y la espiritualidad; el Renacimiento en suma, aunque no reñido con la ampulosidad barroca de sus fachadas. Y lo hace con testimonios de jiennenses ilustres como Enrique Vila-Matas.


Andrés de Vandevira
Sin embargo, al contrario de muchos de sus colegas actuales, arquitectos tan pagados de si mismos como Santiago Calatrava, Andrés de Vandelvira, tan genial como humilde, se definía como maestro de obra y cantero. De hecho fue el Libro de cortes de piedra, de su hijo Alonso, la obra que le dio a conocer como técnico y artesano, aunque son sus grandes trabajos arquitectónicos los que le garantizaron la inmortalidad.

viernes, 20 de septiembre de 2013

Chester Himes, el negro que tenía el alma negra

En la llamada novela negra, y los géneros policiacos en general, no suele ser práctica habitual releer; puede ser por los elementos característicos de suspense e incertidumbre de los que una relectura despoja a una obra literaria. Sin embargo en el caso de las novelas y relatos de Chester Himes puedo garantizar que volver a ellas es siempre un placer para el lector. Chester Bomar Himes (1909-1986) está unánimemente considerado el más grande de los escritores afroamericanos. Pero este autor, a diferencia del resto de los escritores negros, no reivindica ninguna raíz africana. Tampoco se explaya en el victimismo ni aboga por una grey negra. Himes fue negro pero su postura no guarda ninguna relación con la del negro concienciado, que tanto satisface a la progresía blanca. Tampoco con el folclore, la inquietud étnica, el realismo mágico ni ningún otro de los estereotipos a los que suelen adscribirse los literatos de su color.

El primer factor a tener en cuenta es que al dedicarse a la novela negra Chester Himes sabía perfectamente de lo que escribía. Fue delincuente antes que novelista. Nacido en Jefferson City, estudió en Cleveland, pero no durante mucho tiempo ya que un atraco a mano armada le  llevó a la cárcel de Jefferson durante siete años -le habían caído veinte-. Entre rejas leyó incansablemente y comenzó a escribir y publicar. Su máquina de escribir y su inmediato éxito comercial le granjearon el respeto de los demás reclusos. Su experiencia en prisión la cuenta en su libro de memorias-póstumo- La cualidad del sufrimiento, e inspiró un libro de relatos, Negro sobre negro (Black on black), título empleado también para la edición española de sus memorias carcelarias e inspiración de su obra póstuma, Por el pasado llorarás.

En 1945 publica su primera novela, Si grita, déjalo ir (If He Hollers Let Him Go!), que obtiene un gran éxito y le permite dedicarse a la literatura.
En 1953, siguiendo la estela de otros escritores americanos, como Ernest Hemingway, y músicos de jazz como Charly Parker, Lester Young y Dexter Gordon, Himes se traslada paulatinamente a París, cansado del racismo de su país. Casado con una inglesa, a partir de los años sesenta no regresará más a su patria. En esta época comienza la serie de novelas de género negro que protagonizan los detectives de Harlem Ataúd Ed Johnson y Sepulturero Jones (Coffin Ed Johnson y Grave Digger Jones). A estos dos tipos duros debe el éxito mundial y la inmortalidad de obras como Por amor a Imabelle, Todos muertos, Algodón en Harlem, La banda de los musulmanes o Un ciego con una pistola. Es curioso que fuera uno de sus relatos más flojos -Un cadillac de oro puro- el que obtuvo mayor éxito, incluso inspiró  una canción de la banda española Gabinete Caligari. Decía ser un negro que no aceptaba el problema de los suyos como propio, sin embargo en estas obras traza retratos implacables de los submundos policial y del hampa y de los conflictos sociales en el gueto.

Sin embargo el género negro -más negro en su caso, permítanme la broma- no fue, ni mucho menos el único estilo que practicó. Todavía en los EE.UU., tuvo serios problemas para publicar Una cruzada en solitario, por su contenido antirracista, y Tirar la primera piedra, por su apoyo y comprensión hacia la homosexualidad.

No me consta que el cine adaptara obras de Chester Himes, pero la sombra de Sepulturero y Ataud puede verse proyectada en los mitos de la blaxploitation como Cleopatra Jones y Shaft, reivindicados en la película de Quentin Tarantino Jackie Brown.

En 1969 Chester Himes se instaló en la localidad alicantina de Moraira, donde residió hasta su muerte 17 años después. Himes, a diferencia de James Baldwing y el resto de los autores afroamericanos ni muestra ninguna simpatía por los otros negros ni propone solución alguna al problema. Nuestro hombre se limita a dar cuenta de la brutalidad de cuanto le rodea, sin abogar por rendenciones. Su brutalidad es concienciada pero sin concesiones a la conciencia. Por eso, y por su indudable talento, la suya es una obra inmortal.

vídeo: Gabinete Caligari - Haciendo el bobo

Próxima entrega: La Serrana de La Vera, una leyenda feminista (muy pronto)

miércoles, 18 de septiembre de 2013

De escándalo internacional a chiste de mariquitas

Antes Bradley
Todos admiramos en su día el arrojo y el valor de aquel frágil soldadito, Bradley Manning, que se atrevió, a través de Wikileaks, a plantar cara a la poderosa maquinaria militar y política de su propio país revelando vergonzosos secretos de guerra que hoy todos conocemos gracias a él y a los hombres y mujeres de Julian Assange. La cándida temeridad de Manning, que posteriormente se limitó a denunciar que había sido víctima de acoso en el Ejército a causa de su homosexualidad, hizo temblar muchos cimientos, puso en marcha la fuerza represora del Ejército y la Justicia norteamericana y desató una ola de solidaridad que parecía agruparse en torno a una consigna parecida a Salvar al soldado Manning.

Ahora Chelsea
Hasta ahí todo muy loable, incluso la sentencia dictada contra él, pese a condenarle a treinta y cinco años de prisión revisables a partir de los nueve, rechazó la acusación de colaborar con el enemigo, que podía haberle costado la vida. Ocurre que desde el principio el caso Manning tuvo algo de vodevil ¿Qué me dicen de la ocurrencia de robar los datos secretos camuflados en un cedé rotulado como de Lady Gaga? Los gitanos no queren buenos comienzos siempre que lo que venga después sea positivo. Sólo que hace pocas emanas el soldado dejó paralizados de sorpresa y desconcierto a quienes habían sostenido la pancarta Free Manning con su explosiva declaración de que iempre se ha sentido mujer y su anuncio de que piensa comenzar a hormonarse. Ya no volveré a ser Bradley - dijo- Quiero que me llaméis Chelsea.

Ni falta hace decir decir  que Manning tiene el derecho del mundo a cambiar de sexo -género, dicen ahora los/las cursis- y de llamarse como le salga de lo que sea; no comparto que esas operaciones se realicen a cargo de la Sanidad pública, como en tiempos mejores aprobó el gobierno Chaves en Andalucía, pero mi opinión no importa. Noto cierta frivolidad tanto en la forma en que los medios de comunicación han abordado el sorprendente anuncio como en la actitud del propio Manning, prestándose a ser fotografiado con una horrenda peluca por el Ejército, que se encargó de distribuir la foto. De este modo se convertía en sospechoso de colaborar en una posible campaña de desprestigio contra su causa.

Hace algunox años cubrí un congreso de la organización Colegas en el que un transexual recriminaba a sus compañeros que se obsesionaran con la visibilidad, el matrimonio y el outing mientras él debía dormir en la calle porque nadie quería alquilarle un techo, y para la mayor parte de los transexuales la prostitución es la única forma de ganarse la vida. La transexualidad es un asunto mucho más serio de lo que la gente, incluído el propio Manning, pretende hacernos crer. El/la soldado tiene derecho a ser y hacer lo que le venga en gana, pero me temo que va a tener difçicil que sigamos considerándole un preso de conciencia.

vídeo: Pet Shop Boys - How do you ex pect to be taken seriously 


domingo, 15 de septiembre de 2013

El paso imperceptible de periodistas a voceros

Todos estamos de acuerdo en que el fiasco de la candidatura olímpica Madrid 2020 resultó un ridículo absoluto. Pero como siempre ocurre apenas rascamos la superficie. Hablamos del inglés fromlostiano de Ana Botella o de su célebre café con leche; nos escandalizamos del enorme gasto dilapidado e ironizamos con la superpoblación de barandas a la caza del canapé perdido y hallado en Buenos Aires; pero pasamos por alto que, al igual que se dice que en las guerras la primera víctima es la verdad, en fastos como éstos cargados de triunfalismo en los que se apela a un patriotismo sin fisuras, el principal damnificado es el periodismo. De todos los implicados en la quimera olímpica, quienes realizaron el verdadero papelón y enseñaron sus vergüenzas fueron los medios de comunicación españoles. 

Llamaría la atención tanta sumisa unanimidad en un gremio tan dado a mirarse el propio ombligo como el periodistico, si no fuera porque han sido numerosos los eventos, sobre todo deportivos, ante los que la prensa ha adoptado la misma postura de adulación acrítica sin fisuras ¿Alguien ha oído o leido el menor reproche hacia la selección de fútbol o la actuación de Rafael Nadal y Fernando Alonso? No, sólo se narran gestas. En estos malos tiempos para la lírica todo es épica. Loor a los héroes y que nadie se salga de la senda trazada. En su ensayo Todo lo que era sólido Antonio Muñoz Molina nos advierte de que en España, especialmente desde los tiempos de la cultura subvencionada y la recuperación de festejos populares y las tradiciones olvidadas la figura más detestada es la del aguafiestas.

Por nada del mundo los medios y quienes los poseen quieren aguarle la fiesta a nadie. Una vez embarcados todos en una nave que navega hacia lo que algunos han apuntado como el bien común pelillos a la mar, se aparcan las diferencias ideológicas y todos se entregan a la adulación y la fe ciega en la victoria.

Resulta desconcertante que quienes tanto se quejan de que los políticos comparezcan escudados tras pantallas después no tengan nada que preguntar, al meno nada incómodo. No, del periodismo de trincheras pasamos a estar todos en el mismo bando, de la crítica a la propaganda. Lo primero que aparcamos es el escepticismo. Echamos mano de los datos oficiales sinponerlos en duda. Repetimos como loros las especulaciones sobre la creación de empleo y riqueza que traería una olimpiada. Nos tragamos la monserga de los apoyos mayoritarios a la búlgara y los votos comprometidos. De este modo cruzamos sin  darnos cuenta las líneas rojas que separan al narrador de la realidad del militante y a éste del forofo.

Tal vez sea un problema de formación y en las facultades de periodismo la asignatura de pensamiento crítico se eche en falta tanto como la de modestia. Sea como sea, debemos rescatar la dignidad de la profesión, demostrar a los dueños de los medios que en estos tiempos de caída de la rentabilidad no se venden más periódicos con lealtades incondicionales y adhesiones inquebrantables, que a gente espera vernos resoplar en el horizonte como la indomable ballena blanca aunque sea para lanzarnos a hundir el Pequod.

jueves, 5 de septiembre de 2013

El payaso de Micolor

El otro día miraba aburrido un debate en televisión que versaba sobre si los políticos españoles ganan mucho o poco dinero. Los tertulianos más reaccionarios -quiero decir, unos tertulianos que eran más reaccionarios que los demás- se enrocaban en la falacia de que los políticos deben cobrar altos sueldos para evitar que les tiente corromperse. Es como si yo le exijo a mi jefe que me suba el sueldo si no quiere que me tire a la calle a dar tirones a los bolsos de las viejecitas. Uno de ellos llegó a defender que la política sea una suerte de meritocracia a la que sólo accedan los mejores y más preparados, lo cual, al precio que están las matrículas y los masters equivale a decir que sea territorio exclusivo de quienes tienen pasta.

Recordé el caso de un político andaluz que fue sucesivamente concejal y alcalde de su ciudad, posteriormente delegado del gobierno autónomo en su provincia y hasta la fecha, gerente de un parque tecnológico en la misma ciudad. El susodicho, por otra parte una excelente persona a quien además cabe el honor de estar emparentado con los más célebres maquis de Andalucía, tuvo como única profesión privada la de payaso, sí, de esos que animan fiestas infantiles. Es rigurosamente cierto, de hecho se anunciaba como ******* y su troupe -permítanme que oculte el nombre-. No obstante, y pese a mi coulrofobia, reconozco que la de payaso es una profesión tan digna y honesta como cualquier otra e, insisto, se trata de una persona llena de cualidades humanas.

Menos inocente me parece el caso de la nueva presidenta andaluza, que en el curriculum con el que se presentó a las elecciones primarias que nunca llegaron a celebrarse aseguraba que ya era miembra (sic) de las Juventudes Socialistas antes de los dieciocho años, es decir, que la señora Díaz en toda su vida sólo se ha apeado de coches oficiales.

Lo que ni políticos ni opinadores parecen percibir es que el acceso a la política debe ser vocacional, una actividad que se abandona sin traumas para ejercer otra profesión, y ue la dedicación y la honestidad  van con el sueldo, por pequeño que éste sea. De lo contrario podría ocurrir que eso que, despectivamente, algunos llaman la plebe un día se dé cuenta de que a veces hasta el payaso de Micolor destiñe.

martes, 3 de septiembre de 2013

Playlist nº 41: Nanas para guarderías de niños que mojan la cama hasta que se van de botellón

Ayer mismo comenzaron el nuevo curso las escuelas infantiles. Cualquier cuidador o seño de estos aparcamientos para niños que son las guarderías sabe por experiencia que como mejor y más guapas están las bestezuelas a las que cuidan es profundamente dormidas; sólo convenientemente narcotizadas se quedan tranquilas y calladitas. Precisamente para facilitar la sufrida tarea de estos y estas profesionales he preparado esta colección de nanas. No son unas nanas cualesquiera; son canciones de cuna válidas para las exigencias de churumbeles de estos tiempos. Incluyo desde una nana en chino del Raval -Somniatruites- hasta un lied de cuna -Gute Nacht- pasando por una nana lorquiana y equina -Nana del caballo grande-. Y no podía faltar la nana de todas las nanas -Nana de una madre muy madre- en la que, sin complejos, las Vainica Doble traspasaban la delgada línea roja entre la ternura y la cursilería. Buenas noches y que soñéis con los angelitos.

1. The Velvet Underground: Afterhours
2. The Beatles: Golden Slumbers
3. Jaume Sisa: Quasevol nit pot sortir el sol
4. Albert Pla & Pascal Comelade: Somniatruites
5. Frank Sinatra: Dream
6. The Cure: Lullaby
7. Camarón: Nana del caballo  grande
8. Charlie Parker: Lullaby of Birdland
9. Franz Shubert: Gutte nacht
10. Rufus Wainwright: Over the rainbow
11. Gene Vincent: Summertime
12. Björk Guðmundsdóttir & Tríó Guðmundar Ingólfssonar: Gling-Glo
13. Ella Fitzgerald: In the still of the night 
14. Siniestro Total: Camino de la cama
15. Vainica Doble: Nana de una madre muy madre


lunes, 2 de septiembre de 2013

Apagando el fuego con gasolina

Bachar Al Assad
Los tambores de guerra redoblan en torno a Siria. En el momento de escribir esto, el presidente estadounidense consulta a los Representantes la oportunidad de un ataque de castigo mientras Francia le brinda su apoyo incondicional. Cameron de la Isla -británica- tuvo a bien consultar y le dieron calabazas. Aquí, en este rincón remendado del globo, llama la atención la aparente distancia entre los líderes; mientras Pérez Rubalcaba aplaude con entusiasmo la belicosidad de su amigo Hollande, el gobierno de Mariano Rajoy se esconde tras una máscara de prudencia y asegura que sólo actuará con el aval de las Naciones Unidas. Imposible avalista una institución cuyo Consejo de Seguridad es fiel reflejo de los bloques de la Guerra Fría. Además, ¿en qué se diferencia una guerra legal de una guerra ilegal? En ambas muere gente y mata gente. Pienso que esta vez el gran dislate es no haber aprendido nada de los errores del pasado; y no me refiero al socorrido Irak, en cuyo infierno buscan ahora refugio miles de sirios aterrorizados por su propio Hades local. Recuerdo cuando, tras la invasión soviética de Afganistán, los EE.UU. de Ronald Reagan corrieron a financiar y armar a los guerrilleros talibanes, sembrando las semillas de todo el terror y las masacres conocidos hasta ahora y por conocer en adelante.

Nadie busca entender la paradoja de la guerra civil siria: Una sanguinaria dictadura laica -el baazismo- apoyada por una teocracia vecina -Irán- y enfrentada a unos rebeldes mayoritariamente fundamentalistas. Al polvorín de Oriente Próximo sólo le falta que el moderado Obama, con las complicidades que obtenga, prenda la mecha para producir una gran bola de fuego que podría chamuscarnos, si no carbonizarnos, a todos. Lo que realmente importa es que ya pasan del millón las personas que han tenido que escapar de ese país tóxico a quienes ACNUR procura la supervivencia, la salud y el cobijo. Que otros jueguen iresponsablemente a la guerra; yo en lo que pueda apoyaré a ACNUR y os invito a todos a hacer lo mismo.

Vídeo: David Bowie - Putting out fire (Cat People)