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domingo, 29 de mayo de 2016

¡Nena, kaka!



Déjenme que primero les explique el porqué de este estrambótico título. Para determinados especímenes sociales que han proliferado en estos primeros años del siglo XXI. y que con su costumbre simplificadora los medios de comunicación han llamado antisistemas, es norma ortográfica habitual sustituir la letra c oclusiva -cuando va seguida de a, o o u- y la q por una-así casa se escribe kasa y en cuanto a ocupar, ya saben-; también es habitual que en su particular neolengua igualitaria, en lugar de recurrir al cansino ellos y ellas o al horrendo ell@s, tiren por la calle de enmedio y empleen el género femenino para todo dios: nosotras -observen un comunicado de los okupas del llamado Banc Expropiat del barcelonés Barrio de Gracia-; ni la feminista más radical  legría a ese extremo, Así que cuando un niño okupa anda toqueteando lo que no debe sus mayores le dicen ¡nena, kaka!. ETA y la izquierda abertzale también emplearon siempre esta supuesta ortografía de la disidencia.

Bromas aparte, que el asunto se las trae, la policía apunta a que detrás de todos los disturbios que se han producido en los últimos quince años en Barcelona hay unos doscientos alborotadores de simpatías anarquistas e incluso ramificaciones terroristas que igual la montan durante un desalojo que en una celebración del Barça. Al margen de lo que está ocurriendo en Gracia, desde hace algún tiempo se hace notar en toda España un heterogéneo conglomerado humano e ideológico que tiende a sepultar el razonamiento bajo toneladas de consignas aprendidas y a justificar cualquier clase de algarada, por violenta que sea, si lucha contra el sistema opresor. Hace un par de años, tras los disturbios que siguieron a las marchas de la dignidad y despropósitos como el de la Corrala Utopía de Sevilla los llamé bolivarianos en otro artículo de este blog, pero ahora estamos en período electoral y no quiero alimentar el espurio recurso a hablar de Venezuela al que acuden ciertos partidos, medios de comunicación y opinadores profesionales para conjurar lo que consideran una amenaza. Pero igualmente pienso que harían falta algunas desvinculaciones  y pronunciamentos claros frente a quienes tratan de imponer la ley de la selva. El Partido Popular suele enorgullecerse de que si en España la extrema derecha se ha quedado en grupúsculos extraparlamentarios es porque el partido creado por Manuel Fraga supo llevarla a su redil. En cambio Podemos y los movimientos surgidos del 15-M no deben aspirar a contenerlo todo; urge que cuanto antes se desvinculen del chavismo y de la pandilla de Arnaldo Otegui, el hombre de paz, y poner de patitas en la calle a su concejal matón Andrés Bódalo: era sonrojante la presencia el pasado 15 de mayo en la Puerta del Sol de una gran pancarta que exigía su amnistía¡!.

A quienes de forma acrítica quieren elevar a los altares a quien inventó el 15-M y sus sucedáneos les recordaré que como periodísta yo sí que me he sentido indignado al oir en varias ocasiones mientras trabajaba el ripio fascistoide ¡televisión = manipulación!. La última vez fue durante una retransmisión de la concentración que celebraba el quinto aniversario del 15 de mayo de 2011.

Un concejal de la CUP en una de las concentraciones
Volviendo al asunto de los okupas y las algaradas de Gracia, detecto mucho despiste e interés en mezlarlo todo. Se ha querido responsabilizar al pasado activista de la alcaldesa Colau de los coches volcados, los cajeros destruidos, los contenedores quemados y los mossos heridos -de aquellos polvos estos lodos- como si fuera lo mismo oponerse a un desalojo que dar una patada en la puerta y quedarse a vivir. Recordemos en primer lugar que fue su antecesor, el convergente Xavier Trias quien sin someterlo al pleno ordenó pagar con dinero de los barceloneses sesenta mil euros mensuales de alquiler del local que antes de la okupación fue oficina de Catalunya Caixa para evitar que un posible desalojo causara altercados en vísperas de las elecciones municipales de 2015. Se ha llevado a saber estos días que el ayuntamiento ha estado pagando a la propiedad los consumos e incluso los impuestos y tasas del inmueble -IBI y basuras- y que el contrato que unía a Consistorio y dueños preveía cubrir cualquier desperfecto y seguir renovándose si la finca seguía okupada , es decir, en la práctica el Ayuntamiento subvencionaba a los okupas; primero intentó pagarles para que se fueran sin ruido y, como no tragaron, luego hizo de asustaviejas para los dueños. Ahora Trias, que puede ser acusado de malversación de caudales públicos, va diciendo que haber rescindido el contrato, como hizo el nuevo equipo de gobierno fue un error. Otra muestra de la institucionalización y politización del conflicto ha sido la presencia de concejales de la CUP en todos los fregaos de Gracia como unos mamarrachos más.

Después el otro elemento clave a tener en cuenta es quién o quiénes son los propietarios del inmueble en cuestión: como han informado los ahora y cuando funcionaba la Caja de Tarragona -absorbida por Catalunya Caixa- la propiedad consta a nombre de Antártico Vintage, la empresa de Manuel Bravo Solano, patriarca de una conocida familia de especuladores inmobiliarios. Tanta complicidad entre un alcalde y un promotor recuerda sospechosamente al tándem Castedo-Ortiz en Alicante. Los simpatizantes de los okupas defienden su labor social -también los falangistas del hogar Ramiro Ledesma reparten comida y ropa-, pero ¡mira que si todo se reduce a un caso de corrupción!.





jueves, 12 de mayo de 2016

El fango

¿Qué es corrupción? ¡Y tú me lo preguntas!... Pitorreos aparte, ese fenómeno que tanto nos preocupa según las encuestas y que tan poco cuesta según las urnas se podría definir de muy diversas formas según nos convenga, pero para no liarnos y que no nos líen lo mejor sería acogernos a la amplia definición que hace la Comisión Europea: "cualquier abuso de poder para obtener réditos privados", Esto nos sirve tanto para la mordida que es una costumbre sistémica en muchos países de los denominados en vías de desarrollo -si te roban o extorsionan en algunos Estados terminados en tan es muy probable que lo hagan policías, militares o funcionarios aduaneros- como para nuestras corruptelas políticas, institucionales o institucionalizadas: otorgar trabajos y facilitar negocios a cambio de comisiones, financiar organizaciones irregularmente, colocar a personas afines no capacitadas para cubrir un puesto, ocultar bienes o ganancias al Fisco o tener dinero, posesiones o empresas en paraísos fiscales, sobre todo si se ocupa un cargo público. Todo ello es indudablemente inmoral, pero puede ser ilegal o no serlo. Todo ello es corrupción y en la España de hoy nos llega hasta el cuello.

La he llamado corrupción política porque casi siempre se da en ese ámbito y sus cercanías y relacionada con la financiación ordinaria de los partidos, la extraordinaria de las campañas electorales y la gestión de los fondos públicos en lo tres niveles de la Administración, central, autonómica y local. Contra lo que pretenden determinados patriotas partidarios de la recentralización y sus palmeros mediáticos, las autonomías son el nivel menos corrupto de estos tres y es en el ámbito local donde se dan más irregularidades, pues la competencia urbanística y buena parte de la contratación pública corresponde a los ayuntamientos, estrangulados económicamente por el Estado desde la última modificación del Régimen local, y las diputaciones son el reino del nombramiento a dedo de expertos y asesores. El coste de la corrupción en España asciende nada menos que a un veinte por cierto del PIB y es cierto que la mayor porción cuantitativa de ese pastel -mordidas y contrataciones irregulares- se detrae en las administraciones menores, pero las llamadas manzanas podridas -policías sobornados, viajes particulares pagados con dinero público, mal uso de tarjetas- se dan sobre todo en la Admivistración del Estado y grandes empresas públicas y las cuantías defraudadas son menores.

Para calibrar la magnitud del problema nos encontramos con un obstáculo: en España la corrupción es una percepción social que aumenta en periodos de crisis y que no existe como delito. Los delitos tipificados que claramente implican corrupción -tráfico de influencias, cohecho, malversación y prevaricación, que a menudo aparecen juntos. Otras corruptelas como el amiguismo, el dedazo o la financiación ilegal - han quedado impunes o se han eternizado en los juzgados, pues en la legislatura presidida por Mariano Rajoy menos del cuarenta por ciento han llegado a sentencia, lo que no quiere decir condena.

Al hablar de corrupción solemos referirnos  a un lodazal en el que exclusivamente chapotean la política y el empresariado -algún responsable sindical también-. Como a falta de datos oficiales solo podemos saber de ella a través de los medios de comunicación, obviamos los corporativismos delmundo periodístico y el dicho de que entre bomberos no nos pisamos la manguera, pero el fango también cubre a algunos periodistas y los medios que les emplean por sus conexiones y complicidades políticas y comerciales. Era vox pópuli la retroalimentación simbiotica entre los gobiernos de Felipe González y el grupo Prisa. Estos días nos enteramos de que el expresidente ha favorecido los negocios del iraní Massoud Zandi con Juan Luis Cebrián para explotar minas en África. González llegó a grabar un vídeo presntando como emprendedor modelo al iraní, que ha llevado a la ruina a toda empresa en la que ha puesto el pie. Por otro lado cuando los llamados Papeles de Panamá han revelado los negocios petrolíferos del presidente de PRISA y el desvío de sus ganancias a paraísos fiscales, Cebián la ha emprendido a demandas a los mensajeros y ha depurado a quienes han osado referirse a sus componendas desde dentro de su imperio. Más fango mediático: el que expanden las filtraciones y montajes policiales dirigidos por el Ministerio del Interior y voceados por el digital OK Diario y su director.

Se cumplen cinco años desde que el movimiento ciudadano del 15-M tomó las plazas públicas, y algunos de los escándalos contra los que entonces reaccionó una parte de la población española siguen sin sentencia en los tribunales. El caso Nóos sienta en el banquillo, cinco años después, a la hermana y el cuñado del rey, pero el caso Gürtel de apropiación de fondos públicos con la cooperación necesaria de altos cargos y todo un partido político, que estalló hace ya siete años, ni siquiera ha llegado a juício oral. Una exministra del gobierno Rajoy, el yerno del expresidente Aznar y todos los tesoreros del Partido Popular están en el ajo, pero eso no implica más diligencia y sí más obstáculos. En lo que sí se han implicado órganos judiciales ha sido en silenciar toda esta corrupción y frenar cualquier tentativa de castigo y de cambio. Hemos visto a la Fiscalía y la Abogacía del Estado defendiendo a algunos presuntos corruptos -caso Noos-, a los responsables del reparto de causas dejando a otros en manos de jueces afines -caso Gürtel-. Nos queda por hasta dónde llega la Justicia en los nuevos escándalos aparecidos en los últimos meses -ayuuntamientos de Granada y Valencia, diputaciones valencianas, EREs, PSdGa, Operación Púnica, registro del PP de Madrid... el territorio de la corrupción se ampía a diario y el fango llega tan arriba que perdemos la visión y la perspectiva. De momento nos encontranos que el Tribunal Constitucional solo sirve para amenazar e impedir que se exprese la voluntad popular y que la Audiencia Nacional actúa como la heredera que es del Tribunal de Orden Público ((TOP) franquista y se emplea a fondo en perseguir y castigar la protesta y la desobediencia, sea la grabación de una carga policial o la actuación de unos peligrosos titiriteros.





viernes, 18 de septiembre de 2015

Crema catalana



Queda poco más de una semana y  a mitad de la campaña de las terceras elecciones autonómicas que se celebran en Cataluña en los últimos cinco años por obra, gracia, empeño y antojo del president Artur Mas, quien -también hay que reconocer- obró impulsado por el búnker españolista y setentayochista que impidió a los catalanes decidir libre y legalmente su futuro el pasado 9 de noviembre.

No soy precisamente un experto en ajedrez, juego que ni siquiera me gusta, pero jamás había oído que los dos contendientes pudieran enrocarse a la vez. El presidente Rajoy acusa a Mas y el independentismo de dividir en dos a los catalanes, y tal vez no le falte razón, pero son el propio Rajoy y las bravatas de los suyos el máximo común divisor con su negativa a aceptar cualquier modificación, por pequeña que sea, en sus posturas y cerrar cualquier vía de negociación y diálogo. A unos sólo sirve la independencia -ocultando  las probables consecuencias negativas y lo insostenible del final que buscan para el procès- y a los otros sólo les vale la unidad indisoluble. Curiosamente, el 27 de septiembre lo que será decisivo para la victoria de uno de estos bandos irreconciliables o la pervivencia de un tercero de la razón será el millón de catalanes con derecho al voto no nacidos en Cataluña. De hecho de siete millones y medio de catalanes casi cinco millones nacieron fuera de la comunidad.

Si uno hojea el programa de la candidatura independentista Junts Pel Si no encuentra ni una mención a la probabilidad de quedar fuera de las instituciones europeas, e incluso mundiales si se declara la independencia unilateralmente, pero sí la propuesta de que el futuro estado relegue el idioma español a la misma categoría que el occitano y la lengua de signos. Mientras tanto el PP catalán anda tentando a PSC, Ciutadans e incluso a Unió a formar un bloque antiindependentista. Aún en el caso de que los aludidos adoptaran la equivocada estrategia del frentismo debían unirse todos, catalanistas y no, contra la extrema derecha xenófoba de García Albiol y su ralea, tal como las distintas fuerzas francesas se aliaron años atrás para frenar el camino de Jean-Marie Le Pen al Elíseo.

Ya puestos me parece que la propuesta más cargada de razón me resulta la que representa la candidatura de unidad popular Catalunya Si Que Es Pot, que se centra en los problemas económicos y las políticas sociales y en cuanto a la cuestión identitaria aboga por el de el derecho a decidir -o la autodeterminación, que es lo mismo pero sin complejos-, pero de momento veo más trazas de que triunfe la sinrazón; del lado estatal se recurre a esa inadmisible provocación de reformar el Tribunal Constitucional justo antes de las elecciones -la mejor reforma de esa guarida de jueces paniaguados por los partidos sería cerrarla-, y del lado independentista se manipula sin tapujos la televisión pública: TV3 vetó la presencia en sus estudios del economista y exministro Josep Borrell para presentar su exitoso Cuentas y cuentos de la independencia y colabora con toda esta matraca que busca silenciar los escándalos de corrupción en CDC. Entre cuentos de Calleja de unos y amenazas de los otros, esa dulzona mezcla de huevo y crema pastelera cubierta de azúcar caramelizado que es la crema catalana nos tiene más que empalagados. Veremos si no nos termina amargando.





viernes, 19 de junio de 2015

La vuelta a Andalucía en (más de) ochenta días



Le ha costado tanto que casi rompe aguas en el intento, pero al final lo ha conseguido. Desde las elecciones adelantadas del 22 de marzo hasta que la socialista Susana Díaz obtuvo la investidura pasaron ochenta y cuatro días -Phileas Phogg habría perdido su apuesta-. Aunque el combate contra la corrupción fue la principal condición impuesta por Ciudadanos para brindarle su apoyo, en este tiempo de impasse Manuel Chaves no ha dimitido -Griñán lo hizo días después- y se han producido nuevas detenciones en relación al fraude de los cursos de formación. Para este viaje no hacían falta alforjas, diría la sabiduría popular.

El ya de por sí elevado coste electoral de este 2015 se vio elevado en 2015 en 430 millones de euros por la decisión de adelantar unas elecciones autonómicas que en Andalucía correspondía celebrar el año próximo, eso sin contar el coste de esta larga interinidad. La presidenta debe pensar que estamos para muchas alegrías económicas -se debe haber contagiado del optimismo de Guindos-; de un guindo  debe pensar Díaz que hemos caído los andaluces si pretende que creamos que en un año de consejera y presidenta de Andalucía ganó lo mismo o menos que un médico del Servicio Andaluz de Salud. La justificación oficial del anticipo en su día fue la necesidad de mayor estabilidad, ya ven lo estable que fue el resultado -en serio no esperaría Díaz una mayoría absoluta ¿verdad?-; pero no era inestabilidad ni mareo sino patente incomodidad lo que la heredera del chavismo sentía en su asociación con Izquierda Unida. Salvo en el período de la inícuamente denominada pinza, cada vez que el Régimen de Chaves ha perdido la mayoría absolutista, a la hora de buscar acuerdos de gobierno ha preferido mirar a su derecha, donde se siente más a gusto; en alguna otra ocasión la deseada estabilidad sólo le costó ceder un par de consejerías al ambicioso clan de los Ortega del Partido Andalucista; ahora le ha tocado al agente naranja, pero no olvidemos que también lo intentó con el Partido Popular, aunque éste exigía a cambio el apoyo en los ayuntamientos a la lista más votada -siempre que ésta fuese la suya, claro; por fortuna se frustraron los aberrantes pactos a la contra en los que participaban los populares en Alcalá de Guadaira y otros municipios sevillanos. Todo se andará; volviendo al refranero, Dios los cría y ellos se juntan.

Vídeo: Napoleon Solo - Perdiendo el tiempo

jueves, 11 de junio de 2015

Con moderación y respeto


El Tribunal Supremo ha establecido que se puede permitir a los militares que formulen críticas al Ejército siempre que lo hagan con moderación y respeto, y con mesura. En una sentencia el alto tribunal anula una sanción impuesta al presidente de la Asociación Unificada de Militares Españoles (AUME) Jorge Bravo por criticar que se destinaran fondos públicos a festejos militares en época de recortes. No es un asunto mnor si se recuerda que el Ministerio de Defensa gastó en 2013 más de cuatro veces lo presupuestado para ese año, también de crisis.

El teniente Gonzalo Segura
El limitadísimo uso de la libertad de expresión por parte de quienes ejercen una carrera militar es especialmente temido por los mandos y sus responsables políticos cuando se hace para poner demanifiesto corruptelas y chanchullos económicos en el seno de las Fuerzas Armadas. Ahí tienen el caso del teniente Luis Gonzalo Segura, víctima de continuos arrestos consecutivos y para quien el Ejército tramita su expulsión tras haber abordado tan delicados temas, aunque fuera a traves de personajes imaginarios y en una novela de ficción, Un paso al frente. Se ha hablado y se ha escrito mucho sobre los privilegios que el exgeneral Jaime Milans del Bosch disfrutó mientras cumplía condena en prisión incluidos sauna, mayordomo, habanos y suculentos menús especiales, pero el actual ministro de Defensa ha tenido que dar explicaciones sobre que el golpista esté enterrado en el Alcázar de Toledo como una prebenda del rancio abolengo militar concedida por gobiernos anteriores. Recientemente el Ejército concedió el retiro por insuficiencia de condiciones psicofísicas a la comandante Zaida Cantera, víctima de agresión sexual probada y sentenciada por parte de un superior, ahora ascendido a coronel que, tras cumplir condena parcialmente y reincorporarse al mando, la ha denunciado por insultos ante la Justicia Militar -que es a la Justicia lo que la música militar a la música-, y todo por denunciar su persecución en los medios de comunicación y el Congreso de los Diputados. con moderación y respeto; aunque tal vez eso no baste y me exijan que me comporte como los guerreros ante los antiguos emperadores de Japón: con Estupor y temblores, como en la novela homónima de Amelie Nothomb.
Yo espero que los mandos militares estimen que al escribir sobre estos asuntos y apuntar como necesaria la desaparición lo haya hecho

jueves, 21 de mayo de 2015

Documentales de La 2


Los seguidores de los documentales en la sobremesa de la 2 -que pretenden ser muchos más de los que muestran los índices de audiencia- saben que en la sabana los depredadores jamás combaten los unos con los otros. Hienas y leones se gruñen y se rugen, el chacal y el veloz quepardo bufan y fanfarronean pero sin llegar a mayores; hay una entente cordial: puede ser que el que más ruido hace se lleve la mejor pieza, pero el otro sabe que al final habrá festín para todos a la hora de repartirse los restos del ungulado más débil de la manada.

El hambriento cocodrilo se zampa
al pobre ñu
Constituye este ladrar y gruñir sin clavar dentellada más que al indefenso que pasaba por allí el principal alimento de la prensa y la clase política que a ella se asoma; lo llaman confrontación -creo que para divertirse y llenar titulares-, pero para quienes el Serengeti pille lejos también se explica con el símil de los títeres de cachiporra: un muñeco le da mamporros al otro pero por detrás del teatrillo los mueven las mismas manos. En el oligopartidismo y para el oligopolio de los mass media basta con la simulación de una pelea a muerte: los rivales se enseñan los dientes y erizan el pelo, pero acaban zampándose entre todos un antílope tiérnecito o una jugosa cebra -o un impala, que es un bicho muy raro pero tiene pinta de ser comestible para esas fieras hambrientas- mientras el respetable dormita en su sofá. Me olvidaba de la víctima propiciatoria en esta clase de documentales: el ñu, el animal más desgraciado de la sabana.  Los aficionados al género habrán visto docenas de veces a las manadas de ñúes atravesando el Serengeti durante la estación seca en desesperada busca de pastos; todos los años han de cruzar el mismo río,  por el mismo vado; en la otra orilla, con los baberos atados  bajo las mandíbulas, los cocodrilos aguardan el banquete.

En la realidad que vivimos de puertas afuera del Serengeti las presas somos usted y yo; como lo pueden ser un espacio natural, una superficie agrícola o un casco antiguo, cuando no es el dinero y el patrimonio de todos. A menudo los carnívoros y cazadores carniceros se los zampan de un mordisco, gruñéndose y amenazándose entre sí, pero jamás atacándose o dañándose entre ellos. Al contrario, lobos y grandes felinos estarán de acuerdo en vendérnoslo como sacrificios por el bien común. El resultado puede ser un inútil puerto deportivo, un campo de golf para aburridos podridos de billetes o una urbanización en mitad de la nada. Si hace falta se cambian unas cuantas leyes y entre ellos será un aquí paz y después gloria. Los coyotes corruptores y los chacales deseosos de ser corrompidos babean de gula. Los predadores, tan amigos, se reparten el Serengeti mientras el espectador ronca en su  chaise loungue.

Basado en un artículo publicado en Granada Hoy en junio de 2009






domingo, 26 de abril de 2015

Los pluriempleados

Un total de 5.444.600 españoles están en paro según la Encuesta de población Activa de enero a marzo de 2015. Sin embargo algunos privilegiados practican el pluriempleo, y además con el beneplácito de uno de los empleadores, el Congreso de los Diputados, aun a pesar de que los estatutos de dicha institución prohiben expresamente a sus miembros compatibilizar más de un trabajo remunerado. Me refiero, como ya sabrán, al diputado del Grupo Popular Vicente Martínez-Pujalte y al actual embajador en Londres, exministro y exdiputado Federico Trillo. Ambos han reconocido, cada uno a su modo, que, paralelamente a sus tareas institucionales, han estado cobrando por asesorar a empresas investigadas por, presuntamente, haber pagado comisiones para obtener contratos públicos, lo cual ha motivado tanto las críticas de la oposición como curiosas autojustificaciones como el estrambótico asesoramiento verbal -que debe ser como el que da una madre: hijo, abrígate, come, no vayas con malas compañías-. Miembros destacados del Partido Popular han justificado estos casos de lucrativo pluriempleo porque, a su juicio, el Congreso pagan sueldos bajos, y llegan a proponer una ampliación del régimen de compatibilidades de Sus Señorías, que consideran demasiado restrictivo.

Por si necesitan que les refresque la memoria, les recordaré que Martínez-Pujalte sería el digno sucesor de Martínez el Facha, ahora que el historietista Kim anuncia la jubilación del mítico personaje de El Jueves. En cuanto a Trillo, ¿qué más decir del personaje político más repulsivo desde el final del franquismo?; sólo recordaré que el paladín de Aznar en la invasión de Irak, el incansable picapleitos del PP, que no descansó hasta colgar la cabeza -profesional- de Baltasar Garzón en su sala de trofeos, obtuvo notoriedad como coctelero de cadáveres de españoles tras la tragedia del avión Yak-42 que se estrelló en Turquía cargado de soldados procedentes de Afganistán. Más adelante, ya en su actual puesto de diplomático, se vio salpicado por el escándalo de que personas a sus órdenes acogieron y agasajaron en Londres al expresidente de Caja Madrid Miguel Blesa, lo que costó el cargo al cónsul en la ciudad. Pero estos pluriempleados se pasan las incompatibilidades por el arco del triunfo y no pasa nada.







domingo, 15 de marzo de 2015

El retorno de los putrefactos

 Los putrefactos fue uno de los escasísimos trabajos conjuntos de Salvador Dalí y Federico García Lorca, realizado durante la época en que ambos convivieron, junto a Luis Buñuel y Pepín Bello entre otros, en la Residencia de Estudiantes de Madrid. En aquel momento el libro no llegó a ver la luz, pues si bien el pintor entregó las ilustraciones y caricaturas que le correspondían, el poeta granadino se limitó a completar los textos y comentarios que las acompañaban y no escribió el prólogo al que se había comprometido. Fue ya en 1995 cuando la mentada institución y la Casa Museo Federico García Lorca de la Huerta de San Vicente publicaron al fin la obra y organizaron una exposición de originales y documentos que pudo visitarse en Madrid y Granada. En aquella edición incluyó la directora de la Huerta de San Vicente la dedicatoria que aquí reproduzco.


Dedicatoria de Los putrefactos por Laura García Lorca
Según la despiadada -más que irónica- visión de Lorca y Dalí, putrefactos son los anticuados, cursis, retrógrados, blandos y patéticos -los que hoy  llamaríamos casposos-. Por eso mismo el título de este artículo no es adecuado: los putrefactos no han regresado ni están de vuelta, porque nunca se han ido; siempre han estado entre nosotros. Putrefacta entre putrefactos fue la España de la dictadura franquista, un régimen asentado en la corrupción y el robo, que apestaba a cerrado y sacristía -como la definió y la anticipó Machado-, a pies de gris -como se quejaba el Jarabo que interpretó Sancho Gracia para Juan Antonio Bardem y Pedro Costa; aquella España con los hombros cubiertos de caspa de militar chusquero, embadurnada de beatería y del conservadurismo interesado de quienes tenían muchos privilegios heredados que defender.    También esta democracia de hoy está plagada de putrefactos; cada mañana desayunamos con nuevos casos de putrefacción de todos los colores, sean populares valencianos y mallorquines o socialistas andaluces ERE que ERE, con cospedales y blesas, con Betis y Osasuna, estamos lo bastante entretenidos para no precisar echar la vista atrás, ni acordarnos de Soficos, Matesas o aceites de Redondela; para ilustrarnos nos bastan las fotografías de prensa o las imágenes de los noticieros; no nos hacen falta aquellas caricaturas de  trovadores cubistas y lectores de La Veu de Catalunya, pero ¡que grande es repasar tanta genialidad y mala uva!
Ni Picasso se libró de las puyas de Lorca y Dalí


lunes, 20 de octubre de 2014

Aviso a los tres cerditos: Llegará san Martín

Miguel Blesa, Rodrigo Rato e Idelfonso Sánchez Barcoj han tenido que pasar por la Audiencia Nacional esta semana como presuntos ideólogos del escándaloso sistema de sobresueldos mediante tarjetas de crédito opacas otorgado a directivos y consejeros de Caja Madrid, hoy integrada en Bankia. Los dos primeros salieron del juzgado con la obligación de abonar millonarias fianzas civiles e incertidumbre sobre su futuro penal. Rato además une su clara reprobación social a su probable expulsión vergonzosa de un partido para el que sigue siendo un totem.


Dicen que la venganza se sirve fría ¿pero tanto? Los partidos y formaciones tocados por el escándalo se están tomando con muchísima calma la adopción de medidas de castigo. Y en casos como éste considero más efectivos los ajustes de cuentas y las  vendettas que esperar a que actúe la justicia de los hombres. Hasta ahora la impunidad y la sensación de disfrutarla ha sido lo que más ha alimentado la ambición de corruptos y cleptócratas. No creo mucho en el refrán que dice que a cada cerdo llega su san Martín, porque la experiencia nos muestra que no siempre es así, pero confío en que a estos tres cerditos y a los otros ochenta como ellos el lobo los encontrará; soplará, soplará, y sus casas, palacios y búnkeres derribará.

Video: El Pecho de Andy - Llegará octubre

lunes, 11 de agosto de 2014

La escuela de los vicios

Mal oficio es mentir, pero abrigado;
eso tiene de sastre la mentira,
que viste al que la dice, y aun si aspira
a puesto el mentiroso, es bien premiado.
Francisco de Quevedo


Este mes de agosto he tenido ocasión de asistir, en el Festival Castillo de Niebla, a la representación de La escuela de los vicios, un espectáculo creado por Morfeo Teatro a partir de sonetos, escritos políticos y sátiras de Francisco de Quevedo. En la comedia un diablo -por supuesto cojuelo- capta a dos ambiciosos necios para que aprendan en su escuela de los vicios, la única en la que te pagan por estudiar y se obtienen títulaciones como bachiller en mentir, licenciado en engañar, doctor en hurtar y catedrático en medrar.

Con un tono que une el vodevil, un programa de El Intermedio y una chirigota de carnaval, el texto que Francisco Negro ha construido sobre las reflexiones de Quevedo no puede ser más vigente pues habla sobre la eterna presencia de la corrupción y el engaño en nuestras vidas y cómo estos vicios constituyen los cimientos y la argamasa del poder político y económico, si e que existen diferencias entre ambos poderes. Los protagonistas acaban por convertirse en ministros, magistrados y banqueros; se citan explícitamente el euro, la troika, la patria suiza del dinero y la tacañería de quienes negocian con el crédito, pero, lejos de acudir a chistes coyunturales, lo que encontramos son ácidas reflexiones sobre problemas y debilidades persistentes en el tiempo, no sólo en nuestro país aunque las referencias a España y su monarquía -la de los tiempos de Quevedo y la actual, el rey siempre se llama Felipe- son frecuentes. Al final se abren ventanas a la esperanza, mencionando un horizonte en el que el pueblo se adueña de su destino y se libra de sus poderosos parásitos.

El banquero
Puede parecer una obviedad pero la Historia y el presente de España ha estado y está en manos de aplicados alumnos de La escuela de los vicios, cuando no se han convertido ya en avezados licenciados, doctores y catedráticos de las artes del mentir, el robar y el medrar. De hecho exportar el modelo de La escuela de los vicios puede ser más rentable que cualquiera de las reformas y contrarreformas educativas con las que malgastamos tiempo, tinta y saliva. 
El  magistrado
Cada día desayunamos con una nueva corruptela, una vieja cacicada, una estafa o un abuso bancario. Quevedo nos explique con claridad como funcionan los engranajes de la máquina.
La ministra
Pero aunque sean historias bien conocidas no viene mal que una sabiduría como la de


lunes, 14 de julio de 2014

Patria, nación y telas de colores



Hacía muchos años -diría que desde El laberinto de las aceitunas, Sin noticias de Gurb y las novelas de Petros Márkaris protagonizadas por el comisario Kostas Jaritos- que para mi la lectura de un libro no iba asociada a una risa a carcajadas -hasta temer que las mandíbulas se me desencajen y sufrir dolores abdominales-. Ha vuelto a ocurrirme con Catalanes todos, la más reciente novela del joven narrador barcelonés -salvo que sea Rimbaud, a los 48 años un escritor está en la flor de la vida- Javier Pérez Andújar. Reescritura y ampliación de su ensayo Las 15 visitas de Franco a Cataluña publicado en 2002, Catalanes todos es un fresco histórico que relata como los catalanistas conservadores de Cambó celebraron y se unieron al levantamiento franquista, fusilaron rojos con entusiasmo en la Playa del Parapeto -hoy Playa Chernobyl- en Sant Adriá, se enriquecieron durante el franquismo, participaron en la red de fuga de jerarcas nazis, fueron los principales actores de la corrupción y la especulación urbana de aquellos años y, cuando las cosas cambiaron, sobrevivieron manteniendo sus privilegios y la primera fila envolviéndose en senyeras y consignas nacionalistas, pero tan de derechas como siempre. A Franco la ciudad le chiflaba, en especial la sardana, la Moreneta y el Barça. A lo largo de las décadas el lector va encontrando las mismas caras en los desfiles de la victoria, los juegos florales y deportivos del Primero de Mayo -entonces San José Artesano-, las finales de la Copa del Generalísimo a las que el Caudillo era tan aficionado, los cócteles y bailes de la burguesía barcelonesa y las diadas de los últimos lustros, desde la del millón a la de la Vía catalana.

En la novela se repiten apellidos que a muchos sonarán -Vidal-Quadras, Samaranch, Porcioles..-. Sin que en ningún momento el autor lo proclame -no intenta hacer un panfleto-, es sencillo unir por la línea de puntos franquismo, pujolismo y post-pujolismo y concluir que, salvo durante la presidencia de  Lluis Companys y el Tripartito, en Cataluña siempre han mandado los mismos. Se incluyen divertidos episodios escatológicos, delirantes ucronías como la que nos sitúa ante los países del Eje como vencedores de la II Guerra Mundial y otros delirios como el que plantea al exministro franquista y destacado opusino Laureano López-Rodó redactando el borrador del Estatut: Los catalanes, como los demás españoles, son también hijos de Dios. A fuer que Pérez Andújar logra divertirnos con su lengua acerada, y reirse de patrias, banderas y poderosos siempre es sano.
Lo que podrían ser los restos de un rito satánico en Playa Chernobyl

miércoles, 5 de marzo de 2014

Beltenebros en Crimea

En el islote de la Peña Pobre el invencible caballero Amadís de Gaula decide hacer penitencia, tras la cual se hace llamar Beltenebros para entrar en batalla, un episodio imitado por Don Quijote de la Mancha con su retiro a Sierra Morena, de camino a Puerto Lápice. 

Beltenebros dio título a una novela de intriga política escrita por Antonio Muñoz Molina y llevada a la pantalla por Pilar Miró en 1991.

La de Crimea fue la primera guerra fotografiada
Y de la literatura y el cine doy un salto a la Historia y de ahí al presente. En 1850 dio comienzo la Guerra de Crimea, que durante cuatro años enfrentó de un lado a Francia, Gran Bretaña, Prusia y el Imperio Otomano, y en el otro bando la Rusia de Nicolás I. El conflicto, la primera conflagración que contó con corresponsales de guerra y testimonios fotográficos, se desarrolló en la mentada península del Mar Negro donde posteriormente la nobleza rusa y la nomenklatura del PCUS instaló sus dachas de veraneo. Hoy Crimea forma parte de la república independiente de Ucrania, aunque la mayor parte de su población es de origen e idioma ruso. La defensa de este colectivo es la excusa a la que se ha acogido Vladimir Putin para que los ejércitos de Moscú emprendan una invasión encubierta de la península a raiz de las revueltas de Kiev y la huída del expresidente Viktor Yanukovich. Aquí no es fácil tomar partido, distinguir buenos y malos. No caben dudas del autoritarismo de Putin y de su defensa de los intereses de la empresa energética Gazprom, como tampoco las hay de la corrupción del antiguo gobierno ucraniano; pero en el otro lado el gobierno provisional ucraniano está infiltrado por elementos neonazis y de la extrema derecha, y la dos veces primera ministra y actual mujer fuerte, Yulia Timochenko, estuvo implicada en turbios manejos con el gas y el vecino ruso. No podemos prever cómo acabará el conflicto, ni tampoco aventurar una ucronía: ¿Y si la Unión Europea, en lugar de ofrecer a Ucrania un tratado de asociación, le hubiera abierto las puertas a la integración? Tal vez Putin no se habría atrevido a enfundarse la armadura negra de Beltenebros y acudir al rescate de un puñado de paisanos supuestamente amenazados.

sábado, 11 de enero de 2014

Un día de furia (o más)

El  cuerpo en llamas de Joseba Elosegui, tras atentar contra el general Franco en 1970. El dictador salió ileso; el peneuvista sufrió graves quemaduras y fue condenado a siete años de cárcel


Con lo que voy a escribir me propongo traspasar una línea roja y estoy dispuesto a asumir las consecuencias. No lo llamen valentía, considérenlo vergüenza; vergüenza de opinar parapetado tras la pantalla de un ordenador, sin arriesgarme fisicamente, pese a ser consciente de que la revolución -de llegar a producirse alguna vez, no digo triunfar- no será en stream; la vergüenza de no haber hecho nada concreto para evitar que esto llegara tan lejos.

Oferta -real- de trabajo
En este mundo de corruptos no voy a considerarme pacifista, pues no soy de poner la otra mejilla. Devoré hambriento la novela gráfica y la película V de Vendetta y entiendo perfectamente la sed de venganza de los pisoteados y vapuleados. Entonces ¿por qué no actúa usted mismo en lugar de limitarse a cacarear? Fácil: por miedo a las consecuencias penales y porque no tengo interés alguno en suicidarme tras cometer cualquier animalada. Ya he dicho que no soy valiente y es fácil indignarse delante de un periódico, más aún si es digital, pero es muy distinto actuar. 

Otra parecida
Admiro a las víctimas del terrorismo que se atreven amanifestarse en Euskadi frente a la incomprensión y los insultos de quienes nunca entendieron nada. Quede claro que sobre este asunto ni complicidad ni equidistancia, la escoria etarra no es mejor que la de Al Qaeda. No soy quien para exigir heroicidades a nadie; el hijo de Yoyes debe tener 27 años y supongo que sólo querrá olvidar pero me -nos- habría conmovido verle aparecer en el aquelarre -buena analogía- de Durango para plantar cara al portavoz Kubati y exigirle que le pidiera perdón por haberle arrebatado a su madre ante su mirada de niño de tres años. Lo repito, no podemos exigir heroicidades.

Es reiterativo decir que no soy pacifista; las personas y los pueblos tienen derecho a defender, con violencia si es necesario, a ellos mismos, a los suyos, su pan y su libertad. Ayer mismo tuvimos un buen ejemplo en la revuelta de Burgos. El joven novelista Eloy Moreno plantea una situación similar en Lo que encontré bajo el sofá y concretamente en el capítulo titulado Una mañana toledana.

No voy a hacerlo yo; ni puedo ni tengo el valor ni la desesperación necesarios, pero ¿que persona honesta condenaría que cualquier día un modesto preferentista metiera una bala en la frente al señor Blesa? ¿o que un pequeño accioista de Bankia le haga lo mismo a Rodrigo Rato? La épica y la citada novela de Moreno exigen - espero no desvelar nada importante- que el protagonista acabe quitándose la vida, como hicieron tantos desahuciados demasiado desesperados para acordarse de  llevarse por delante a algunos de los responsables, pero ¿acaso no existen también los finales felices? Ya advertí de que cruzaría algunas lineas rojas.


miércoles, 11 de diciembre de 2013

La impaciencia de Job


Aquí la envidia y mentira

me tuvieron encerrado.
¡Dichoso el humilde estado
del sabio que se retira
de aqueste mundo malvado,
y, con pobre mesa y casa,
en el campo deleitoso,
con sólo Dios se compasa
y a solas su vida pasa,

ni envidiado, ni envidioso!

Esto escribió Fray Luis de León en las paredes de su celda, tras cumplir una condena de cárcel que él consideraba injusta. Entre las obras literarias más destacadas del agustino del Siglo de Oro permanece su Exposición del libro de Job, una reflexión sobre el libro considerado más complicado del Antiguo Testamento que precisamente versa sobre el castigo injustamente infligido al inocente mientras las villanías del culpable quedan impunes. Javeh reprende a Job por no haber aceptado su voluntad y por sus quejas cuando tuvo que sufrir y encarar las tentaciones de Satanás, mientras los amigos de aquel hombre justo, Elifaz, Bildad y Sofar, intentan convencerle de que el pecado siempre es castigado, aunque su autor lo haya olvidado, y que Dios ve faltas en todos, incluído el propìo Job, pero éste sigue lamentándose impaciente.

 Como Job en algunos momentos de sus desventuras, hoy son otros quienes se obstinan en su total inocencia y reclaman, si no exigen, el perdón de la superioridad. Acaba de suceder con el exministro Jaume Matas y con el exalcalde de Torrevieja, cuya petición de indulto apoya el ochenta por ciento del PP valenciano y de momento le ha librado de la cárcel. Incluso el nefando José María del Nido se ha sumado a este circo de los impacientes. ¡Algo habrán hecho!, pensarían Elifaz, Bildad y Sofar, que hasta dudarían del mismísimo Job.


jueves, 5 de septiembre de 2013

El payaso de Micolor

El otro día miraba aburrido un debate en televisión que versaba sobre si los políticos españoles ganan mucho o poco dinero. Los tertulianos más reaccionarios -quiero decir, unos tertulianos que eran más reaccionarios que los demás- se enrocaban en la falacia de que los políticos deben cobrar altos sueldos para evitar que les tiente corromperse. Es como si yo le exijo a mi jefe que me suba el sueldo si no quiere que me tire a la calle a dar tirones a los bolsos de las viejecitas. Uno de ellos llegó a defender que la política sea una suerte de meritocracia a la que sólo accedan los mejores y más preparados, lo cual, al precio que están las matrículas y los masters equivale a decir que sea territorio exclusivo de quienes tienen pasta.

Recordé el caso de un político andaluz que fue sucesivamente concejal y alcalde de su ciudad, posteriormente delegado del gobierno autónomo en su provincia y hasta la fecha, gerente de un parque tecnológico en la misma ciudad. El susodicho, por otra parte una excelente persona a quien además cabe el honor de estar emparentado con los más célebres maquis de Andalucía, tuvo como única profesión privada la de payaso, sí, de esos que animan fiestas infantiles. Es rigurosamente cierto, de hecho se anunciaba como ******* y su troupe -permítanme que oculte el nombre-. No obstante, y pese a mi coulrofobia, reconozco que la de payaso es una profesión tan digna y honesta como cualquier otra e, insisto, se trata de una persona llena de cualidades humanas.

Menos inocente me parece el caso de la nueva presidenta andaluza, que en el curriculum con el que se presentó a las elecciones primarias que nunca llegaron a celebrarse aseguraba que ya era miembra (sic) de las Juventudes Socialistas antes de los dieciocho años, es decir, que la señora Díaz en toda su vida sólo se ha apeado de coches oficiales.

Lo que ni políticos ni opinadores parecen percibir es que el acceso a la política debe ser vocacional, una actividad que se abandona sin traumas para ejercer otra profesión, y ue la dedicación y la honestidad  van con el sueldo, por pequeño que éste sea. De lo contrario podría ocurrir que eso que, despectivamente, algunos llaman la plebe un día se dé cuenta de que a veces hasta el payaso de Micolor destiñe.

domingo, 15 de abril de 2012

Elefantiasis


"La foto es lo que más detesto. El recochineo. Ahí, posando. Presumiendo de haber destruido la belleza y la vida. Siempre que veo una de esas fotos me dan ganas de hacerme yo una con alguno de ellos detrás. La napia contra un árbol. Pumba, pumba. Toma foto, chaval. Meterle a escopetazos las fotos por el ojete" (Arturo Pérez-Reverte)



¿Abrirá España alguna vez la veda para la caza mayor? La imagen de un Jefe de Estado sonriente ante un elefante derribado en una remota sabana, mientras su país se precipita en el Maelström de la crisis, debería bastar y sobrar para dar comienzo a la temporada de monteríaabatir todo lo que nos sobra, nos cuesta un riñón y nos avergüenza.

Pero me temo que ni siquiera se abrirán las ventanas para que se vaya el olor a cerrado y veamos qué se cuece dentro de un régimen sostenido por la adulación, el peloteo y la autocensura. Este 14 de abril en el que por segunda vez un rey cayó -éste en un sentido más literal que el abuelo- buscaba información en un digital nacional y me encuentro con la foto de marras, un hermoso ejemplar de una especie en extinción a la que ante todo hay que proteger de la aristocracia hace, a su pesar, de telón de fondo para el satisfecho y campechano cazador blanco -de corazón negro, debe pensar su nietecito herido al enterarse de que si el yayo no fue a verle al hospital fue porque prefirió irse a cazar elefantes-. 
La princesa Corinna zu Sayn-Wittgenstein,
amante del Rey, organiza cacerías
en África para nobles y multimillonarios
A los pocos minutos no sólo ha desaparecido la foto del diario español -que al día siguiente la coloca en portada de la edición de papel, de locos- sino que la propia web de Botsuana que ofrece paquidermos a 45.000 euros la escopeta ha sido bloqueada; bendito caché de Google que siempre conserva las pruebas del delito.

El oso Mitrofán
Ni siquiera vivir en un país que considera cultura la tortura y muerte de un animal en un espectáculo me hace entender como deporte el dar muerte a animales, pero estaría dispuesto a admitir cazador como animal doméstico si a quien entre sus títulos ostenta la presidencia de honor de WWF, no se le conociera todo un historial de cacerías de osos en parques naturales de Rumanía y Rusia -pobre Mitrofán, triste icono republicano-, antílopes, búfalos y guepardos; incluso de la propia especie y misma sangre -aunque aquello, aseguran, fue accidental-. Si además no fuera el español que ha sufrido mayor número de accidentes y ni uno solo laboral, me tragaría que, puesto que los jóvenes en paro le quitan el sueño, se marchó a cazar elefantes para darles de comer.


Dicen que la Familia vive su particular annus horribilis pero ¿y el de sus súbditos?, avergonzados a diario por el encubrimiento a un yerno tramposo, por las felicitaciones a un príncipe saudí que se libra de una condena por violación,  por la opacidad de las cuentas, por los regalos extemporáneos o por las intercesiones en favor de oligarcas amigos de la Casa que se nos venden como gestiones por el interés de la economía nacional.
  Aunque en esto le acompaña un gobierno que nos hace creer que Repsol es España y que, según la Momia Guanche, ofender a una petrolera es ofendernos a todos.

Será que la escopeta nacional, que es de gatillo fácil, es un valor eterno; y la montería, en Cabañeros o en Botsuana, es la misma cace un rey o un invicto generalísimo. Será que al Azor y al Fortuna sólo los diferenciaban los metros de eslora, que la herencia genética de este régimen es la causa de su elefantiasis.